Desde 2010, siete nuevos países se han unido a la OCDE.
Costa Rica se ha convertido en el 38o país miembro de la OCDE.
Los países de la OCDE y sus socios clave representan alrededor del 80% del comercio y de las inversiones mundiales.
La OCDE reúne a países miembros y socios que colaboran a escala local, nacional y regional en cuestiones fundamentales de ámbito global. A través de nuestros estándares, normas e iniciativas, contribuimos a orientar y concretar reformas en más de 100 países de todo el mundo, sobre la base de nuestra experiencia colectiva y los valores que compartimos.
Países miembros
Los 38 países miembros con los que contamos en la actualidad abarcan todo el mundo, desde América del Norte y del Sur a Europa y Asia-Pacífico. Los países están representados por embajadores, que forman parte del Consejo de la OCDE, órgano que supervisa nuestro trabajo y formula recomendaciones sobre el mismo, conforme a la Convención de la OCDE. Los embajadores colaboran con nuestros expertos y con las delegaciones de otros países, transmiten nuestros datos y análisis y desempeñan un papel esencial en nuestros informes por países. La Comisión Europea participa en nuestro trabajo, si bien no tiene derecho de voto ni puede tomar parte de forma oficial en la adopción de normas presentadas al Consejo.
Convertirse en país miembro de la OCDE es un proceso exigente. Los países tienen que estar preparados para ser miembros, lo que no solo significa cumplir nuestra misión y adherirse a nuestros valores, sino también ser capaces de asumir las responsabilidades y exigencias que acompañan al estatus de miembro activo de la organización. Para convertirse en miembros, los países pueden presentar su candidatura o ser invitados por el Consejo de la OCDE a iniciar un proceso de adhesión. Se establece entonces una hoja de ruta para la adhesión que determina las modalidades, las condiciones y el proceso que debe respetarse. Se realiza un examen técnico para evaluar las políticas y las prácticas del país en comparación con las mejores prácticas de la OCDE. También se estima la capacidad del país para implementar las normas de la OCDE. Esta fase se suele traducir en una serie de medidas que el país debe implementar para poder cumplir los requisitos de membresía de la OCDE. Cada país debe ratificar la adhesión a la OCDE para convertirse en miembro efectivo.
La OCDE trabaja en estrecha colaboración con países y socios clave entre los que se encuentran algunas de las principales economías del mundo: Brasil, China, India, Indonesia y Sudáfrica. Estos países participan en el trabajo diario de la OCDE, aportando nuevas perspectivas y mejorando la pertinencia de los debates sobre políticas públicas. Los socios clave participan en las discusiones sobre políticas públicas de los comités de la OCDE, se involucran en los estudios realizados por la Organización y forman parte de las bases de datos estadísticos.
Trabajamos con numerosos países en distintas regiones, principalmente a través de iniciativas regionales, que abarcan África, Eurasia, Oriente Medio y el Norte de África, América Latina y el Caribe, el Sudeste asiático y Europa Sudoriental. Estas iniciativas regionales facilitan la comparación de políticas públicas y el intercambio de mejores prácticas entre países de una zona geográfica concreta, tanto dentro de su región como en relación con otras. También contribuyen a orientar a los países hacía estandáres internacionales reconocidas y hacia ambiciosos programas de reforma, con el objetivo de crear las condiciones para una mayor prosperidad y un mayor bienestar de los ciudadanos no sólo a escala nacional, sino también local y en las ciudades. En función de los distintos tipos de colaboración, los países y las economías también pueden ser invitados a participar en comités y foros mundiales.
El Centro de Desarrollo de la OCDE, que incluye países de África, Asia y América Latina, facilita el diálogo sobre políticas públicas con un enfoque específico en economías emergentes y en desarrollo. El Centro enriquece los debates sobre políticas de desarrollo gracias a los análisis llevados a cabo por sus expertos. El objetivo es ayudar a los responsables políticos a encontrar soluciones que estimulen el crecimiento y mejoren las condiciones de vida en las economías emergentes y en desarrollo. También albergamos el Club del Sahel y África Occidental (SWAC), una plataforma internacional cuyo objetivo es promover políticas que mejoren el bienestar económico y social de las poblaciones de esta región.